La sensibilización con Inmunoglobulina E (IgE) a componentes alergénicos específicos de los animales con abundante pelo es un factor de riesgo para la inflamación de tipo 2 y los síntomas de asma.

Clinical and Translational Allergy, Volumen 14, número 2, Febrero 2024

El trabajo publicado en la revista Clinical and Translational Allergy * analiza si la sensibilización con IgE a componentes alergénicos de animales con abundante pelo [en adelante peludos, según especifican los autores] predice una reacción inflamatoria de tipo 2 acentuada y síntomas asmáticos en los niños.
El estudio se propuso como objetivo secundario evaluar la tenencia de animales de compañía y su influencia, durante la infancia, en la aparición de asma o sensibilización alérgica a las mascotas.

La prevalencia de sensibilización a los animales peludos aumento a nivel mundial en los últimos 30 años. 

Las pruebas de escarificación cutánea (PEC) con extractos estandarizados de compuestos de origen animal son recomendadas como procedimiento diagnóstico inicial para pacientes con sospecha de alergia. Sin embargo, los autores plantean que los componentes alergénicos individuales ofrecen la posibilidad de definir la sensibilización a moléculas alergénicas específicas y aclarar su significado en relación con la intensidad de los síntomas alérgicos y la reactividad cruzada. 

Las seroalbúminas de animales se consideran alérgenos menores y con intensa reactividad cruzada. Por el contrario, las lipocalinas, junto con la uteroglobina Feld d 1 se consideran alérgenos mayores. 

Participantes y pruebas
La investigación seleccionó a 203 niños de 4 a 17 años con diagnóstico de asma basado en pruebas de función pulmonar anormales y 33 controles. 

La utilización de una micromatriz permitió el análisis de la sensibilización por IgE a los componentes alergénicos de perros, gatos y caballos. El estudio también incluyó pruebas para determinar la fracción de óxido nítrico exhalado (FeON) con el fin de medir la inflamación bronquial, junto con oscilometría de impulsos, espirometría, provocación con metacolina y pruebas de escarificación cutánea (PEC). 

Finalmente, los adultos responsables de los pacientes completaron un cuestionario para investigar la tenencia de mascotas y el perfil de síntomas como sibilancias, disnea, roncus y tos persistente durante los últimos 12 meses. 

Resultados obtenidos
La eosinofilia y la positividad de la prueba de FeON se correlacionaron con la sensibilización a alérgenos de todos los animales peludos en los niños asmáticos (no en los de control), en particular con las lipocalinas. 

Los niños afectados por estas sustancias tuvieron siete veces más probabilidades de informar síntomas asmáticos que quienes no lo estaban.

Función pulmonar
Apenas el 7% de los niños con asma, según las mediciones de la función pulmonar, tuvieron resultados positivos en la prueba de broncodilatación tras la interrupción de la medicación antiinflamatoria. El artículo precisa que raras veces estuvieron sensibilizados contra componentes alergénicos de animales peludos y no haber encontrado ninguna asociación entre los resultados de la prueba de metacolina y la sensibilización a alérgenos de animales peludos.

Los niños con hiperreactividad de la vía aérea (HRA) tuvieron más probabilidades de presentar síntomas en comparación con quienes no la tenían. Éstas eran aún mayores en los asmáticos sensibilizados y con HRA. 

La presencia de mascotas en el hogar no mostró una relación significativa con la prevalencia de HRA.

Síntomas de asma
De acuerdo con los resultados de las pruebas de componentes alergénicos, la sensibilización fue más frecuente entre los niños con asma que entre los de control. 

La eosinofilia se asoció con sibilancias pero no con otros síntomas respiratorios, aunque la sensibilización a alérgenos de animales peludos representó un factor de riesgo para la elevación de los eosinófilos. 

Tenencia de  mascotas
La convivencia con perros se asoció con menores tasas de sensibilización a componentes de lipocalinas. El efecto fue más evidente entre los controles no asmáticos. 

Los niños que tenían perros en el mismo domicilio también manifestaron menos síntomas y sus recuentos de eosinófilos sanguíneos eran más bajos que los no convivientes con esas mascotas. 

El efecto fue notable entre los niños asmáticos. La tenencia de un perro no afectó el riesgo de mediciones anormales de la función pulmonar.

Pruebas de escarificación cutánea
La sensibilización a componentes alergénicos de animales peludos se asoció de manera significativa con los resultados de las PEC, pero la positividad  no se correlacionó con resultados similares en las pruebas de broncodilatación y de hiperreactividad de la vía aérea. Pese a ello, no se comprobó una fuerte conexión entre la sensibilización a todos los animales peludos medida en las PEC y la FeON.

Tenencia de mascotas y conclusiones
Los autores destacan que la variedad de mediciones objetivas ejecutadas les permitió analizar con  exhaustividad la relación entre la sensibilización a moléculas específicas de animales peludos y las anomalías del sistema respiratorio en la infancia. 

Así fue como, en primer lugar, pudieron observar que la sensibilización con IgE contra alérgenos de animales peludos es un factor de riesgo para la inflamación bronquial. Al mismo tiempo, apreciaron que la convivencia con un perro se asocia con una menor probabilidad de desarrollar sensibilización contra diferentes especies de animales peludos, inflamación bronquial de tipo 2 y síntomas semejantes al asma. 
Por último, encontraron que la sensibilización a estos alérgenos no se asocia con una prueba de broncodilatación positiva después de la discontinuación de la medicación antiasmática regular.

En coincidencia con informes anteriores, los investigadores pudieron confirmar que la sensibilización a alérgenos mayores como las lipocalinas, se asocia con eosinofilia y síntomas de asma.

El estudio considera que la inflamación bronquial medida con la FeON representó el enfoque con mayor sensibilidad para detectar personas sintomáticas. 

Los autores resaltan que tras la suspensión de la medicación antiinflamatoria contra el asma, observaron una mejor correlación con la sensibilización a componentes alergénicos de animales peludos que la espirometría o la oscilometría de impulsos. 

La sensibilización a alérgenos específicos de animales peludos en niños se asocia con eosinofilia en sangre, inflamación de la vía aérea y síntomas semejantes al asma pero sin pruebas de función pulmonar anormales. 
En la infancia, la sensibilización a aeroalérgenos y la eosinofilia en sangre podrían predecir la aparición posterior de asma.

* Clinical and Translational Allergy
Pets, furry animal allergen components, and asthma in childhood
Katariina Lajunen, Anette M. Määttä, Kristiina Malmström, Satu Kalliola, Hanna Knihtilä, Terhi Savinko, L. Pekka Malmberg, Anna S. Pelkonen, Mika J. Mäkelä 
5 de febrero, 2024
https://onlinelibrary.wiley.com/doi/epdf/10.1002/clt2.12337