Las plantas medicinales como el eucalipto, jengibre, ajo, matico, limón, cebolla, manzanilla y borraja, fueron las más utilizadas como alternativa para prevenir y tratar síntomas de la COVID-19.
En el Perú existe una cosmovisión ligada a la medicina tradicional, donde las plantas con efectos medicinales juegan un papel fundamental en la prevención y tratamiento de enfermedades, y la pandemia de la COVID-19 no fue ajena a ello.
El artículo Creencias y prácticas culturales de uso de plantas medicinales... que publica la revista Gaceta Médica de Bolivia * se propuso identificar a las plantas medicinales que cumplieron un papel protector en el contexto de la COVID-19. En este sentido, estudiaron su utilización por parte de los pobladores de la Sierra y Selva Central del Perú, los efectos deseados y propiedades antiinflamatorias, descongestionantes, expectorantes, antitusígenas y antivirales.
Para las autoras y el autor del trabajo **, la pandemia puso en descubierto la ineficiencia de los sistemas sanitarios a escala planetaria. Los países no estuvieron preparados para afrontar con efectividad una emergencia sanitaria de tal dimensión que dió paso al confinamiento social obligatorio para evitar la transmisión rápida del virus y el colapso de los hospitales.
La cuarentena como medida de prevención, los contagios confirmados y las muertes, acarreó incertidumbre, miedo, estrés y ansiedad, síntomas que suelen presentarse en situaciones de riesgo, como la provocada por el virus desconocido que condujo a la crisis sanitaria.
A ello contribuyeron los medios informando constantemente sobre fallecimientos y la falta de abastecimiento en los servicios de salud, con el consecuente impacto negativo en la salud mental de las personas con la consiguiente provocación de la “cultura del miedo”.
Ante esta situación de incertidumbre, temor al contagio y crisis sanitaria, muchas personas prefirieron no asistir a los centros de salud, y si concurrían, sintieron falta de atención adecuada o impartida inoportunamente.
Tal es así que, como alternativa, recurrieron a las plantas medicinales consideradas como elemento terapéutico accesible y útil para afrontar dificultades relacionadas a la salud. La vigencia de la credibilidad en las plantas continúa en el tiempo; su efectividad y aceptación popular lo testifica.
Alcances de la experiencia
Otros países también usaron plantas medicinales. Tal es el caso México, donde un 70 % de los pobladores de Chiapas afirmaron haber recurrido a las plantas con el fin de fortificar el sistema inmunitario y tratar los síntomas de la COVID-19; entre ellas señalaron: el jengibre por sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, el eucalipto, el ajo y la cebolla (antivirales e inmunomoduladores), el limón (vitamina C) y la manzanilla (por sus propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y fungicidas.
Los pobladores ecuatorianos de Cañar usaron eucalipto y jengibre, mientras los de Santo Domingo de los Colorados recurrieron al limón (89 %), jengibre (64,7%) y ajo (45,6 %).
Una encuesta brasilera informa que el 90,1 % de los participantes afirmó haber consumido durante la COVID-19 plantas medicinales como la manzanilla, jengibre, ajo, entre otras.
Para el caso de Nepal, una investigación demostró que fueron usadas 63 especies de plantas con fines preventivos.
En Santa Clara, Villa Clara (Cuba), entre 60 personas encuestadas el 55 % manifestó haber utilizado fitopreparados caseros para reforzar el sistema inmune con el fin de afrontar los síntomas. Entre las plantas mencionaron la cebolla, sábila, naranja y orégano.
Por otra parte, la provincia de La Habana se constituyó en la mayor productora de fitofármacos y apifármacos, con la cebolla en jarabe como la planta más eficaz.
Las plantas de Perú
En diversas zonas del Perú, los pobladores también recurrieron a las plantas por sus propiedades antivirales, antiinflamatorias, antitusígenas, expectorantes y antipiréticas.
En el norte peruano, las autoras y el autor, dan cuenta del papel de las ´plantas frías´, entre ellas la cebolla, y las ´plantas calientes´, como el ajo, limón, eucalipto y jengibre, contribuyen al tratamiento de la enfermedad por sus relaciones con los pH alcalinos y ácidos.
De igual manera, en Cusco (Perú) se consumieron diversas plantas medicinales para reforzar el sistema inmunitario, prevenir y tratar síntomas; entre ellas el artículo destaca el eucalipto, jengibre, ajo, matico, limón, cebolla y manzanilla.
El ajo por su potencial para inhibir el SARS-CoV-2 y el jengibre por contener fitocompuestos que contribuyen al descenso de la carga viral.
En el mismo sentido, diversos autores encontraron que, como parte de la cultura popular, las plantas medicinales de las zonas altoandinas de Perú desempeñaron un importante papel en la lucha contra la COVID-19: el matico, eucalipto y borrajas fueron usadas en la fitoterapia para el tratamiento de las afecciones respiratorias y contribuyeron a reducir los efectos del virus.
Los líderes indígenas del país comunicaban por entonces a través de entrevistas que el matico, ajo, jengibre, limón, eucalipto, la manzanilla y cebolla, mejoraban la respiración aliviando los síntomas de la enfermedad.
Obtención de muestras
La investigación recurrió al muestreo no probabilístico de sujetos voluntarios o sus familiares en primer grado de parentesco, que cursaron con la Covid-19. La muestra de correspondió a 595 pobladores de la Sierra y Selva Central del Perú.
El uso y efectos deseados de plantas medicinales (según creencias y prácticas culturales de los pobladores), fue medida por medio del cuestionario sobre uso y efectos deseados de plantas medicinales durante la COVID-19, elaborado por el equipo de investigadores del estudio.
Para validar su contenido, el cuestionario de tres dimensiones y 12 ítems fue sometido a cuatro expertos. El coeficiente de concordancia de Aiken demostró que todos los ítems fueron aprobados (validez perfecta de 1).
La validez de constructo (correlación ítem-test) se realizó a través del coeficiente de correlación R de Pearson; en este caso, la totalidad de los ítems fueron mayores que 0.2, cifra demostrativa de su validez. Asímismo, evaluaron la confiabilidad con los resultados de la muestra estudiada (595 pobladores de la Sierra y Selva del Perú): en este caso, el coeficiente de consistencia interna alfa de Cronbach arrojó un resultado de 0.976 indicativo de confiabilidad muy alta.
Los datos se procesaron con el Minitab versión 20 y las hipótesis contrastadas con la prueba Z de Gauss para una proporción en muestras grandes con probabilidad de éxito € = 1/10, al 95 % de confianza estadística.
Resultados del estudio
Las diversas experiencias descriptas y citadas por el artículo, anima a los autores a señalar que, en el contexto de la pandemia, las plantas adquirieron mayor importancia con evidencias de sus beneficios curativos.
Los productos apícolas, las frutas y plantas medicinales, entre ellas el ajo, demostraron su acción antiviral y anti-SARS-COV-2 al ser utilizadas como terapia profiláctica y paliativa de los síntomas, por sus propiedades inmunomoduladoras, antiinflamatorias y antivirales. Además de las propiedades antibacterianas y antivirales de las plantas mencionadas, el artículo destaca el efecto positivo del ajo contra las cepas resistentes a los antibióticos.
De igual forma, el jengibre actúa sobre el virus sincitial respiratorio humano (HRSV) con capacidad para impedir la formación de la placa estimulada por HRSV en las líneas celulares HEp-2 y A549. La fitoterapia a través del jengibre resultó efectiva por sus propiedades antiinflamatorias, antiagregantes, antialérgicas, antileucotrieneas y antioxidante.
Por su parte, el ajo fue utilizado contra el SARS-CoV-2 mostrando que existe un acoplamiento de 17 de los 18 compuestos del aceite esencial de ajo en las estructuras complejas de la proteína ACE2.
Los hallazgos presentados y los diversos estudios descriptos en la sección Discusión del artículo aseveran que durante la COVID-19, las plantas medicinales cobraron gran reconocimiento e importancia.
Limitaciones y fortalezas
Entre las limitaciones de la investigación las autoras y el autor reconocen que la aplicación del cuestionario en su forma virtual, podría presuponer sesgos en las respuestas; sin embargo, en las preguntas del cuestionario se utilizó un lenguaje de fácil comprensión y el enlace online se envió a través de medios electrónicos confiables. Para evitar inconvenientes recomiendan que las próximas investigaciones recolecten datos de manera presencial.
La conclusión del artículo ratifica que las plantas medicinales como el eucalipto, jengibre, ajo, matico, limón, cebolla, manzanilla y borraja, fueron las más utilizadas como alternativa para prevenir y tratar síntomas de la COVID-19, por lo que recomienda continuar investigando las propiedades de estas y demás plantas, con el objetivo de aportar mayores evidencias científicas.
* Gaceta Médica de de Bolivia
Creencias y prácticas culturales de uso de plantas medicinales en el contexto de la COVID-19 en pobladores de la Sierra y Selva Central de Perú
Marisol Condori-Apaza 1, Mely Ruiz-Aquino 2, Gustavo Alberto Reyna-Arauco 3, Ana Cecilia Villavicencio-Condori 4, Marina Ivercia Llanos de Tarazona
Diciembre 2023
** Filiación de las autoras y el autor:
1- Doctora en Sociología. Magister en Sociología. Universidad Nacional del Centro del Perú, Perú.
2- Magister en Salud Pública y Gestión Sanitaria. Universidad de Huánuco, Huánuco Perú, Perú.
3- Doctor en Gestión Pública y Gobernabilidad. Universidad Nacional del Centro del Perú, Perú.
4- Universidad Continental S. A., Perú.
5- Doctora en Ciencias de la Salud. Universidad Nacional Hermilio Valdizán de Huánuco, Peru.