Noticia en desarrollo; 1a actualización 22/5/2025, 13:30hs
aSNC-SIIC
El virus chikungunya (VCHIK) suele causar síntomas parecidos a los de la gripe, pero también puede provocar en algunas personas dolor articular crónico e intenso persistente semejante al producido por la artritis reumatoide. El patógeno es transmitido por mosquitos identificados en más de 110 países.
El trabajo que publica la revista Cell Reports Medicine * (volumen 6, número 5) amplía el conocimiento sobre la patogénesis de la CHIK crónica y ofrece información sobre posibles opciones terapéuticas.
La investigación sugiere que las células T CD4+ intensifican su acción para combatir el virus y, en el proceso, causan inflamación crónica.
Los hallazgos explicarían la razón por la que algunas personas infectadas con el VCHIK desarrollan dolor articular intenso; en ciertos casos, enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide, coinciden exactamente con sus manifestaciones.
Células inmunes contra la Chikungunya
La investigación utilizó células inmunitarias presentes en muestras de sangre de 39 pacientes portadores de VCHIK para analizar cómo respondían a los péptidos del virus Chikungunya.
El estudio, llevado a cabo en Colombia, reveló los principales tipos de células inmunitarias responsables de combatir la infección por el VCHIK; también da cuenta por primera vez de los sitios del VCHIK (epítopos virales) que generaron las respuestas inmunitarias de mayor intensidad.
Así es como hallaron que los linfocitos T CD4+ mostraban una reacción potente al VCHIK. Los específicos TCD4+ actúan como componente normal de la respuesta antiviral del organismo, por lo general acompañados de linfocitos T CD8+.
Sin embargo, el estudio muestra que las células T CD4+ son las más activas en la lucha contra el VCHIK, permaneciendo en el organismo como células T de memoria una vez superada la infección.
Los investigadores encontraron que el 87% de los pacientes presentaban en sangre niveles detectables de linfocitos T CD4+ de memoria específicos del VCHIK seis años después de la infección inicial. En cambio, solo el 13% aún contaba con linfocitos T CD8+ de memoria específicos del VCHIK después de igual lapso.
Los autores consideran que el perfil particular de células T CD4+ se observa con mayor frecuencia en pacientes con enfermedades autoinmunes.
Las típicas células T
La actividad descripta de las células T CD4+ permitiría explicar la asociación entre la infección por VCHIK y la enfermedad crónica de tipo autoinmune.
Los numerosos estudios en ratones que incluye la Discusión del ensayo fundamentan la patogenia las células T CD4+; al considerarlos, el ensayo logra profundizar la función que cumplen en personas afectadas por el VCHIK.
En situaciones normales, la polifuncionalidad de las células T CD4+les permite producir diversos tipos de moléculas de señalización que facilitan la coordinación orgánica de la respuesta inmunitaria a un patógeno.
Sin embargo, los pacientes con VCHIK que desarrollaron dolor articular intenso tenían más linfocitos T CD4+ monofuncionales.
Incluso años después de la infección inicial, sus linfocitos T producían principalmente una molécula inflamatoria llamada TNF-alfa que ayuda a dirigir la actividad de las células inmunitarias durante una infección pero, según la experiencia documentada, se supone que el TNF-alfa no persiste mucho tiempo después de la eliminación del virus.
Evidencias y reflexiones
La evidencia del trabajo remarca que las células T CD4+ monofuncionales serian las responsables del dolor articular y la inflamación crónica tras la infección por VCHIK.
Aunque los investigadores admiten que aún resta mucho por aprender, afirman que las futuras terapias que inhiben el TNF-alfa podrían ser prometedoras para el tratamiento de síntomas similares a la artritis en pacientes con VCHIK.
Próximos pasos
El estudio inspira interrogantes importantes, como el destacado al concluir el trabajo: ¿por qué las mujeres de cuarenta y tantos años tienen una mayor probabilidad de desarrollar dolor articular crónico tras la infección por VCHIK?
La continuidad de la investigación ayudará a esclarecer si las células T CD4+ agreden por error los propios tejidos del organismo cuando reaccionan al VCHIK.
El trabajo es consecuencia del creciente abordaje científico que estudia las conexiones entre las infecciones virales y las enfermedades autoinmunes. Otros virus, como el del dengue, transmitido por mosquitos, también pueden causar dolor articular crónico e intenso. Además, muchas personas padecen COVID persistente, inflamación crónica y debilitante de tipo autoinmune que suele aparecer tras la infección por SARS-CoV-2.
Por último, los autores señalan que las preguntas que se formulan pretenden encontrar respuestas a la relación entre los virus y las enfermedades autoinmunes.
* Cell Reports Medicine
Chikungunya virus-specific CD4+ T cells are associated with chronic chikungunya viral arthritic disease in humans
Rimjhim Agarwal1,2, James Chang1, Fernanda H. Côrtes1,3, Calvin Ha1, John Villalpando1, Izabella N. Castillo4, Rosa Isela Gálvez1, Alba Grifoni1, Alessandro Sette1,5, Claudia M. Romero-Vivas6, Mark T. Heise4,7, Lakshmanane Premkumar4, Andrew K. Falconar6, Daniela Weiskopf1,5
20 de mayo, 2025
Filiación de las autoras/es:
1- Center for Vaccine Innovation, La Jolla Institute for Immunology (LJI), La Jolla, EEUU.
2- Biomedical Sciences Graduate Program, School of Medicine, University of California, San Diego (UCSD), La Jolla
3- Laboratory of AIDS and Molecular Immunology, Institute Oswaldo Cruz, Fiocruz, Rio de Janeiro, RJ 21040-360, Brazil
4- Department of Microbiology and Immunology, University of North Carolina School of Medicine, Chapel Hill, EEUU.
5- Department of Medicine, Division of Infectious Diseases and Global Public Health, University of California, San Diego (UCSD), La Jolla
6- Laboratorio de Enfermedades Tropicales, Departamento de Medicina, Fundación Universidad del Norte, Barranquilla, Colombia
7- Department of Genetics, University of North Carolina School of Medicine, Chapel Hill